JING

Ahora hablaremos de una de las 5 sustancias fundamentales del cuerpo humano según la Medicina Tradicional China, esta sustancia fundamental de la que hablaremos es el Jing.

La palabra Jing puede definirse o traducirse como esencia y es la más importante de las sustancias fundamentales de nuestro cuerpo, pues de ella depende toda la vida orgánica.

La esencia vital o Jing se almacena en el riñón y se deriva de 2 fuentes:
a) esencia congénita o prenatal
b) esencia adquirida o postnatal

La esencia congénita, también denominada como “antes del cielo” o prenatal, es la que heredamos de nuestros padres y es la única que esta con nosotros desde el momento de la concepción, es la responsable de nuestro crecimiento, estructuración, también controla nuestra reproducción y la creatividad, podríamos quizás traducirla como nuestros genes.

En medicina china la debilidad del Jing se asocia a múltiples problemas reproductivos como la infertilidad, la impotencia o los abortos de repetición.

La cantidad de esencia congénita viene determinada genéticamente y esta fijada desde el inicio de nuestra existencia, no existe ninguna forma de incrementarla y la vamos gastando de forma gradual a lo largo de la vida, su perdida la asociamos al envejecimiento y con los signos propios de la edad como el pelo canoso, la sordera, la micción frecuente… que si recordamos la teoría de los 5 elementos están asociados con el agua y el riñón.

La esencia postnatal, se produce a través del bazo (entendiendo este como es sistema digestivo desde un punto de vista de la MTC), el cual produce esta esencia a partir de los componentes purificados de nuestros alimentos y agua, y mejora aún más con una dieta adecuada y un buen estilo de vida. A diferencia de la anterior, la esencia postnatal si puede recargarse y puede ayudar a compensar las debilidades del Jing congénito hereditario.

En las mujeres, el desgaste de la esencia congénita también viene marcado por la menopausia, que en medicina china suele tratarse con tónicos de riñón.

Recordemos que en el Nei Jing (un clásico de medicina interna) nos dice que la vida de las mujeres se rige por periodos de 7 años (llega la pubertad a los 14, las muelas del juicio salen a los 21, el punto más importante de fuerza y vitalidad se alcanza a los 28 años y a partir de los 49 años suele aparecer la menopausia. Estos datos estadísticos tan precisos se han visto con el paso del tiempo, alterados por las condiciones de vida actuales.

En los hombres los periodos son de ocho años y el agotamiento del Jing comienza a los 56 años, cuando la emisión seminal se va agotando, su vitalidad disminuye, sus riñones se agotan y su fuerza física alcanza su fin.

Mientras que el Qi (energía) se asocia con el movimiento, el Jing es mucho menos dinámico y esta más relacionado con el crecimiento interno y con el declinar final. También ha estado vinculado con la creatividad, pero debemos tener presente que como todos los excesos, el exceso de actividad creativa agota rápidamente la cantidad limitada de que disponemos de Jing congénito.

Como sustrato vital de la vida orgánica, cuando es necesario el Jing también puede nutrir alguna de las otras sustancias fundamentales que sustentan el Qi (energía) o la Xue (sangre)

El jing también se ha asociado con la producción del tuétano de los huesos (médula ósea según la medicina occidental), y según la antigua teoría china está asociado con el cerebro. Por lo que los daños cerebrales y las debilidades o alteraciones en la memoria y en la concentración, también están relacionadas con la deficiencia de Jing y pueden en ocasiones tratarse mediante tónicos de riñón.

Podríamos decir que el Jing puesto que nos acompaña desde el nacimiento hasta la muerte, el declinar de esta energía nos lleva hasta el final de nuestros días.

Todos recordareis que os explico la famosa teoría de la pila, que suelo mencionaros en la primera visita para que entendáis como podemos mantener o augmentar nuestra energía.

Os explico que somos como una pila recargable, nacemos con una cierta carga que se ira agotando a medida que pase el tiempo y existe otra parte que podemos recargar mediante una correcta alimentación, y digo correcta porque no todos los alimentos que ingerimos nos aportan la misma cantidad de energía, por lo que debemos buscar alimentos con alto contenido energético como pueden ser los cereales integrales.

Recordad, que también mencionamos, que debemos valorar la cantidad de energía que obtenemos del alimento y la que necesitamos para procesarla, un alimento con mucho contenido energético pero que precise mucha energía para su metabolización tal vez no sea lo más adecuado, a veces otro de menos energía pero que requiera poca energía para metabolizarlo nos será de más utilidad.

Pero volviendo a la pila, la parte recargable mediante la alimentación es la que con más facilidad utilizamos, pero cuando tenemos una recarga baja (Jing postnatal), bien por un consumo excesivo o por una recarga deficiente, utilizaremos más energía Jing prenatal.

Así que vosotros mismos, pero cuando la energía no recargable (Jing origina o prenatal) se agota, todo llega a su fin. Y devolvemos nuestra energía a la fuente original.